El ácido hialurónico es una molécula que es uno de los principales componentes del tejido conectivo, formando una matriz gelatinosa que rodea las células. Sirve especialmente como elemento estructural y lubricante.
El AH es una sustancia que se encuentra de forma natural en nuestra piel y que retiene el agua y ayuda a mantenerla hidratada y rellena. Los rostros de los bebés son redondos y suaves porque a una edad temprana tenemos la mayor concentración de ácido hialurónico. Sin embargo, como se degrada con la edad, los adultos empiezan a perder volumen facial y a desarrollar arrugas.